Las Escuelas de Trabajo surgieron como una respuesta del Gobierno de la Ciudad a la situación de muchos jóvenes que no pueden terminar los estudios primarios o secundarios, tienen dificultad para encontrar un empleo, o directamente no tienen un espacio de contención dónde hablar de sus problemas.
Nos propusimos ayudarlos a encontrar un camino para construir su futuro. Para ello las Escuelas de Trabajo coordinan y articulan estratégicamente todos los programas laborales, educativos, culturales y deportivos, de distintos ámbitos; y presentan esa oferta a los jóvenes.
Pasado un tiempo de la implementación de esta política pública, empezamos a ver los primeros resultados. Hace unos días compartimos un tiempo y reconocimos a aquellos que pudieron completar sus estudios. Fueron 16 chicas y chicos que terminaron el secundario, y uno, el primario. Se abren nuevas oportunidades para ellos, porque tienen la formación para tener un empleo o para seguir estudiando y, por qué no, animarse a la Universidad.
Otro caso es el de aquellos que optan por formarse en oficios. Por ejemplo los chicos del centro de Formación Laboral Angel Casanello. Ellos realizaron el taller de herrería y en menos de 20 días se encuentran produciendo. Están realizando los 72 estacionamientos para bicicletas que vamos instalar como parte del Plan de Movilidad.
También hay jóvenes que están realizando entrenamientos laborales. Como se da en la Vecinal Juana Arzuduy, donde se desarrolla un taller de auxiliar de peluquería y muchos de los asistentes ya piensan en conseguir la financiación para abrir su propio salón y tener un emprendimiento propio. O Nicolás, Brian y Ezequiel que realizan su entrenamiento en Sumiagro como auxiliar de tareas generales. El año pasado fueron 33 los jóvenes que comenzaron sus entrenamientos y quedaron efectivos.
Todo esto se completará con la construcción del edificio propio, que se está levantando en Barranquitas a la vera de la autopista. Es una inversión de más de $ 30 millones para continuar brindando herramientas y oportunidades a los jóvenes de la ciudad. Porque las Escuelas de Trabajo son un espacio para crecer.